Prostitución, pornografía y otros comercios. Ana de Miguel.

Formo parte de la Asociación Foro MIRaN, Mujeres por la Igualdad Real de Navarra. En Mayo invitamos a Ana de Miguel a desarrollar su ponencia con el tema que desarrolló en su libro «Neoliberalismo sexual: el mito de la libre elección». La ponencia tuvo lugar el 19 de Mayo de 2017.

Ahí van a algunas ideas a modo de síntesis:

• En la actualidad, se está dando una interpretación muy peligrosa sobre el eslogan “mi cuerpo, mi decisión”, acompañándolo de: “sí a la prostitución, sí a los vientres de alquiler”

• El feminismo no puede ser la única teoría emancipadora que tiene como fin un mundo más justo e igualitario. Sin embargo, con este teoría ocurre algo que no se da con otros movimientos políticos o sociales, y es la falsa idea de que cualquier opinión por el hecho de ser expresada por una mujer, ya es feminista, y no es cierto. No ocurre así con la población, por ejemplo, inmigrante, de la que no se espera una única posición unívoca y uniforme en la defensa de sus derechos, o del proletariado de quien se conoce y acepta actitudes heterogéneas y diversas. Esto supone una falta de respeto al movimiento feminista, que queda simplificado, desdibujado, disminuido, despojado de su complejidad teórica, alejado de las innumerables y rigurosas investigaciones que  le sostienen, y que muestran una determinada posición ante la vida. Es una contradicción argumental que resta autoridad a las mujeres.

• La república española abolió la prostitución por entenderse como la forma máxima de sumisión. Es necesario conceptualizar de forma clara cuál será nuestro legado, qué mundo queremos dejar.

• Si queremos cambiar una sociedad patriarcal, hemos de conocer y entender las causas. En este sentido, condenar no es lo mismo que conocer, condenar no cambia la sociedad.  Es necesario entender el cambio social que ha llevado a sustituir la explicación mítica (propia de sociedades más antiguas) por la explicación científica.

• En las sociedades contemporáneas se está dando una suerte de relativismo ético que no cuadra con el pensamiento feminista, lo que no vale aquí, no puede valer en otros países, (como ejemplo: mercantilización de los vientres de alquiler). La contradicción se da cuando al mismo tiempo estamos en un momento histórico en que la sociedad busca por primera vez la igualdad de mujeres y hombres. En este sentido, el nivel de intolerancia que hemos desarrollado frente al machismo institucional es de los más altos de Europa. Impensable aquí el caso de Grecia de Tsipras. Si no hay mujeres en el Gobierno, no hay democracia. ¿un gobierno que se define como transgresor y popular sin mujeres? Este país se indignó, sin embargo y al mismo tiempo, los varones españoles abrieron la puertas entusiasmados a mujeres de los países más desestructurados y empobrecidos para la prostitución. A España se le llamó el burdel de Europa. Chicas negras, caucásicas, chinas… prostituídas han reventado el mercado porque han tirado los precios, chicas maravillosas con aspecto infantil. ¿Cómo nos decís a hijas, madres, que aprobáis la igualdad y al mismo tiempo mantenéis el harén de la democracia? Cientos de miles de mujeres cuyos cuerpos son de libre acceso a los hombres.

• Hemos de preguntarnos ¿cómo se reproduce la desigualdad en las sociedades formalmente igualitarias? Todo el mundo dice “yo no he sido, he educado igual a mis hijas e hijos… la sociedad tampoco, entonces… ¿será por naturaleza?. Ahí es donde aparece la idea de que las diferencias son fruto de la libre elección. El mito de la libre elección es un relato poderoso que habla del sentido de la vida, explica quién eres y qué quieres hacer con la vida.  Pero… ¿qué es educar en igualdad? Si todo el mundo va igual en un colectivo humano (y en este sentido Celia Amorós se refiere a las idénticas) es que es un producto, una construcción social.  Al 90% de las mujeres se les pone pendientes al nacer (en el Norte se van desprendiendo lentamente de esta costumbre). Se reproduce desigualdad haciendo como que no hay.  Y sin embargo, existe un compromiso implícito en las madres y padres de “fabricar niñas y niños”, pero  ¿cómo se fabrican niños?: no tolerando que sea niña. Las criaturas llegan a las guarderías ya aprendidas, ya saben cómo situarse bien en la sociedad.  Actualmente ya cuesta encontrar hasta una goma de borrar que sea neutra.

• Algunas ideas sobre la teoría Queer: Venimos de la reivindicación de libertad y  autonomía a través del empleo. Este movimiento reivindica la libertad través del mayor número de identidades sexuales y de géneros, que se expresan mediante la forma de vestir. La libertad personal se homologa a la libertad sexual. Se hace una apología de la sexualidad como modelo de vida sana y como forma de transgresión social, desplazando hacia aquí la fuerza de otras reivindicaciones como la de acceder a empleo en igualdad de condiciones.

• Teoría de la doble verdad, según la cual, por un lado cualquier chica es mi igual, por el otro, la pornografía enseña la otra verdad, lo que es una chica y lo que se puede hacer con ella. Basta echar un vistazo a pagina como: ‘guarras.com’, ‘babosas.com’, ‘cerdas.com’, ‘muy cerdas.com’. El modelo de sexualidad que se expresa es la misma desde los años 60, la jerárquica.  El mensaje a los hombres es claro: “están aquí estos cuerpos porque tienes derecho a tu placer, y están para ti. Vais a tener cuerpos de libre acceso porque tenéis derecho a ellos” A las chicas no les gustan ni los cuerpos que se ven ni lo que hacen con ellos. Esta teoría cobra fuerza especialmente en la adolescencia y muestra también dos mensajes claros para ellas:

                -aprenden a callar, a hacerse las tontas.

                -podéis vivir de vuestro cuerpo.

• La prostitución es una Institución legitimada desde antiguo: Platón, Aristóteles, la iglesia católica… En el siglo XIX hay una rebelión que se observa en la obra “los Miserables” de Víctor Hugo.

Representación de una mujer, por Van Gogh

• También el feminismo se rebela. Decidimos que no queríamos vivir ni en jaulas de oro ni en lo más abajo de una jerarquía creada por los hombres. El feminismo entiende que el poder quiere los cuerpos de las personas para comerciar con ellos, y manifiesta una postura firme: “no queremos vivir de nuestros cuerpos. Mi cuerpo no es una mercancía”. Ni los Estados ni la Comunidad deben regular el deseo individual. Deseo, que no derecho. Valga como ejemplo la poligamia, definida por Ana De Miguel como escuela de desigualdad humana. El matrimonio ha de ser reciprocidad y no estamos por la labor de regular escuelas de desigualdad.

Como veis fue una ponencia muy interesante. En una sesión anterior de este Foro, debatimos en el Club de lectura sobre su libro del mismo título.

El neoliberalismo aplicado a la sexualidad

Al terminar dimos paso al debate en el que quienes asistieron pudieron intercambiar opiniones, dudas, experiencias e ideas sobre el tema. Una buena ocasión para seguir formándonos y repensando sobre cuestiones de actualidad.

Si queréis participar en la Asociación encontraréis información de nuestras propuestas en  el facebook Foro Miran.

¡Vuestras aportaciones serán bienvenidas!